Filtración por membranas
En la actualidad, la filtración por membranas cross-flow es una tecnología madura, regularmente utilizada como técnica estándar para el procesamiento de líquidos, a fin de obtener la clarificación, aislación de productos, concentración y/o separación en una grande variedade de producción industrial. Entre los beneficios de esta tecnología se incluyen:
- Separación selectiva y uniforme.
- Rendimiento de producción aumentado.
- Bajo consumo de energía.
- Foot print pequeña.
- Tecnología establecida.
- No se requieren aditivos, agentes floculantes ni sustancias químicas para recubrimiento previo.
- El calidad del prermeado no cambia con las variaciones del flujo de alimentación.
- Fácil de incorporar a instalaciones existentes.
- Bajo mantenimiento.
Principios básicos
En la filtración convencional, el flujo del aporte es perpendicular a la superficie de la membrana, lo que provoca una acumulación de residuos que, finalmente, reduce la permeación de los líquidos. En la filtración de cross-flow, el flujo es tangencial a la superficie de la membrana, lo que ocasiona una acción de fregado continuo que elimina casi totalmente la formación en la membrana de una capa de suciedad provocada por los residuos de la corriente del aporte y las macromoléculas. Impulsado por la presión en los módulos de filtración, parte del líquido atraviesa la membrana. Esta fracción se denomina “permeado” o “filtrado”, mientras que la fracción que no atraviesa la membrana se denomina “retentado” o “concentrado”. En algunas aplicaciones, el producto final puede ser el permeado, como en la clarificación de jugos de frutas o la purificación de efluentes, o el retentado, como en la concentración de antibióticos. En algunos casos, ambas corrientes, el permeado y el retentado, serán productos finales valiosos. En función del tamaño y el tipo de las partículas o los solutos contenidos en la corriente del aporte, se encuentra disponible una amplia gama de procesos de separación.
Para obtener información técnica y de las aplicaciones más detallada, visite nuestro Centro de conocimiento.
Microfiltración (MF)
Proceso de baja presión para la retención de material en suspensión de tamaño de partículas de 0,01 micrones o más. Las partículas más pequeñas (por ejemplo, sales, azúcares y proteínas) atraviesan la membrana. Las presiones operativas típicas varían de 5 a 45 psi (0,34 a 3 bares).
Ultrafiltración (UF)
Proceso de media presión que ofrece la retención de proteínas, coloides y material biológico, incluidas partículas de 0,005 micrones o mayores (peso molecular mayor que 1000 Dalton). Las presiones operativas típicas varían de 7 a 150 psi (0,48 a 10 bares).
Nanofiltración (NF)
El agua y los iones monovalentes, así como las sustancias de peso molecular bajo (menor que 250 Dalton) atraviesan las membranas de nanofiltración. Se retienen los iones divalentes o polivalentes, como las sales divalentes. Las presiones operativas entre 120 y 600 psi (8 a 41 bares) son típicas.
Ósmosis inversa (RO)
Proceso de alta presión que retiene casi todas las partículas y especies de iones, mientras que el agua y algunas moléculas orgánicas atraviesan la membrana. Las sustancias con peso molecular mayor que 50 Dalton se retienen casi sin excepciones. Típicamente, las presiones operativas se encuentran entre 300 y 850 psi (21 y 59 bares) pero pueden exceder 1100 psi (76 bares) en algunas aplicaciones.